26 nov 2010

el mundo imaginario de Miliki

imagina sonreír a cada momento, que todo lo que te rodea te hace sentir bien, en calma; imagina que todo lo que has vivido de pronto se recompone como las piezas de un puzzle que una vez colocadas muestran la imagen completa y terminada de tu vida; puedes imaginar, por ejemplo, que todo el mundo es sincero y que eso precisamente es lo que hace que se mueva el mundo; o imaginar que dejas de tener miedo, que caminas por la calle completamente seguro de tu futuro; e incluso, imagínate que trabajas en lo que deseas, sin pisar a nadie, sin el sentimiento de tener que sobresalir de los demás; imagina que tus compañeros respetan todas las ideas que tu tomas y las de ellos te sirven para hacer crecer tus proyectos; imagina un mundo donde ningún amigo sufre por tus decisiones, y que cada una de ellas es comprendida y aceptada; imagina también que no sientes vergüenza ajena y que tus principios no serán nunca pisoteados; imagínate en una realidad sin terror, donde las guerras son utopías creadas en la mente para una novela de fantasía; ahora quisiera que imagines que los niños no temen por su futura educación, que no corren riesgos, que pasean sonrientes jugando y haciendo realidad sus ilusiones; imagina que no hay nadie cansado de vivir, sino que sienten la esperanza para seguir en este mundo; imagínate que preocupa más la educación que la violencia o el trapicheo de drogas, o que ni siquiera existe el mal en las calles; imaginate siempre recibiendo sonrisas, la del panadero, el cliente, el banquero...; párate a imaginar un mundo donde existe el cambio, un cambio de necesidades, poder encontrar la manera de pagar los favores con favores; imagina que se piense en el beneficio del prójimo, que se interesan por ellos mismos tanto como por los demás; imagina ahora que tus padres nunca te dejarán, que estarán enseñándote a vivir, hasta que la muerte sea la meta merecida; imagina esos ojos cada día, cada noche, cada despertar a su lado...

Puedes imaginar cuanto quieras, soñar despierto con las cosas que harían a tu corazón ser pleno... pero llega un momento, un segundo en el que tienes que dejar de imaginar y la sensación de hacerse realidad tiene cabida, por que todo eso es lo que yo siento cada vez que pienso en ti. El mundo necesita tu sonrisa para concretar su realidad. Imagino que todo es posible contigo